La sal es un condimento que cambia por completo un plato y saber utilizarla de forma adecuada marcará la diferencia. Salar carne correctamente es un arte que puede hacer que tus platos pasen de ordinarios a extraordinarios. Desde mejorar la textura hasta resaltar los sabores naturales, utilizar este elemento de forma adecuada es imprescindible para lograr resultados excelentes en la cocina.
Estos son algunos secretos y trucos maestros que te ayudarán a salar tus cortes de manera más óptima.
Elegir la sal adecuada
No todas las sales son iguales y de hecho, en la actualidad, existe en el mercado una variedad muy extensa entre la que elegir. Pero, en este caso, cuando se trata de salar carne se recomienda utilizar sal marina o sal kosher. Se recomiendan estas variedades porque tienen una textura más gruesa que la sal de mesa, lo que facilita que la aplicación sea uniforme.
Aplicar la sal con antelación
Este es uno de los consejos más importantes. Para que se produzca una salazón efectiva es necesario darle tiempo al condimento para que penetre en la carne. Dependiendo del tipo de corte se necesitan distintos tiempos. Para los más delgados, como bistecs, debemos sazonar la carne al menos 30 minutos antes de cocinarla y para los más gruesas, como costillas o piezas para asar, se puede salar la carne hasta 24 horas antes y dejarla reposar en el refrigerador
Distribuir la sal de manera uniforme
Es importante distribuirla de manera uniforme sobre toda la superficie de la pieza para evitar que haya zonas con más sal que otras, lo que influiría a la hora de apreciar los sabores. La manera más eficiente de aplicarla es utilizando las manos para frotar la sal en la carne, y así asegurarnos que cubrimos bien toda la superficie, incluso los rincones y grietas.
No excederse con este condimento
Aunque la sal es fundamental para realzar el sabor de la carne, si nos excedemos a la hora de aplicarla podemos arruinar el mejor corte. Es importante ser moderado, porque siempre se puede agregar más sal después de cocinar, pero es muy difícil corregir un exceso de la misma. Como regla general, se utiliza aproximadamente 1 cucharadita de sal por cada kilo de carne.
Añadir especias junto a la sal
Especias como el romero, el tomillo, el ajo o la pimienta son excelentes opciones para complementar el sabor de la carne sin anularlo. Estas le dan un toque extra de sabor junto a la sal. Son una buena opción a tener en cuenta para mejorar el sabor de nuestros platos.
Usar la técnica de salmuera
Esta técnica consiste en hacer una mezcla de agua, sal y a veces se le puede añadir azúcar, y se utiliza para remojar la pieza antes de cocinarla. Ayuda a mantener la carne jugosa y tierna, funciona especialmente bien en cortes magros como el pollo o el pavo. Para un resultado óptimo, se tiene que dejar que la carne repose en la salmuera durante al menos una hora antes de cocinarla.
Cantidad de sal según el corte y la preparación
Hay que tener en cuenta que no todos los cortes de carne requieren la misma cantidad de sal, dependiendo de la cantidad de grasa que tenga. Los cortes más grasos pueden necesitar menos sal que los cortes magros, ya que la grasa natural añade sabor y jugosidad. También es necesario considerar la forma en que se va a cocinar la carne. Por ejemplo, si se va a asar a la parrilla, conviene salar generosamente para compensar la pérdida de sal durante la cocción.
Salar los cortes de carne correctamente es un aspecto fundamental a la hora de preparar unos platos deliciosos y sacarles el máximo partido. Aplicando estos secretos y trucos maestros, se mejorarán las habilidades en la cocina lo te permitirá llevar tus platos a otro nivel. Es importante experimentar antes estos consejos y ajustarlos según tus preferencias personales. ¡ A disfrutar!
Comentarios (0)